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Lamentablemente, el cáncer es una enfermedad con la que la mayoría de las personas están demasiado familiarizadas. Según una encuesta realizada en el 2017 en nombre de CBS News por parte de SSRS, el 54% de los estadounidenses afirman que ellos o un familiar directo han sido diagnosticados con cáncer en algún momento de su vida.
Si además se tiene en cuenta el número de personas que tienen miembros de la familia extendida o amigos que han sido diagnosticados con cáncer, ese porcentaje aumenta sustancialmente.
Aceptar el diagnóstico de otros le está afectando a usted
El cáncer es un diagnóstico que afecta a toda la familia. Es importante que recuerde que no hay nada malo en decir que el diagnóstico de otros le está afectando a usted también – esto no significa que usted sea egoísta, ni egocéntrico o desconsiderado.
Por qué el cáncer afecta tanto a miembros de la familia
A pesar de que usted no haya sido diagnosticado con cáncer, existen muchas razones por las que podría estar experimentado niveles de estrés más altos de lo normal, ansiedad o tristeza, incluyendo:
- Ver sufrir a un ser querido. El cáncer es una enfermedad muy agresiva y, a menudo, el tratamiento también lo es. Ver cómo un ser querido pierde el cabello, está postrado en la cama o experimenta dolor puede ser traumatizante.
- Le preocupa que usted también corra el riesgo de sufrir cáncer. Si un familiar cercano fue diagnosticado recientemente, es posible que le preocupe sufrir cáncer en el futuro.
- Pasar los días cuidando de alguien. Cuidar de alguien puede ser un trabajo a tiempo completo y emocionalmente agotador. Es muy común que los cuidadores se enojen, sufran de agotamiento o depresión e incluso que se pongan enfermos mientras cuidan de alguien. De hecho, esto tiene un nombre: estrés de los cuidadores.
Cuidar de un ser querido con cáncer
Aunque no hay normas definitivas sobre cómo comportarse al cuidar de alguien que ha sido diagnosticado con cáncer recientemente, existen una serie de pautas universales que muchas personas siguen.
Infórmese.
Aunque de ninguna manera usted tiene que convertirse en un experto, nunca está de más informarse acerca de su diagnóstico, tratamiento y maneras comunes de ayudar a aquellos que padecen de cáncer (¡que es exactamente lo que está haciendo ahora mismo!)
Escuche sin ofrecer consejo.
A no ser que alguien le pida consejo explícitamente, es mejor que no lo ofrezca. Muy a menudo, su ser querido solo quiere que le escuche. Si necesita consejo, acudirá a su médico.
Ante la duda, pregunte.
¿No sabe qué hacer? ¡Simplemente pregunte! Aunque las sorpresas son agradables, nos hemos dado cuenta de que, a menudo, los pacientes necesitan ayuda con cosas específicas, particularmente:
- Su apoyo
- Visitas regulares
- Ayuda para recoger a los niños de la escuela
- Cartas, correos electrónicos y llamadas telefónicas
- Ayuda para hacer recados
Sométase a un chequeo.
Ya sea porque les asusta el proceso en sí mismo, lo que puedan descubrir o porque no quieren gastar dinero, muchas personas no se someten a chequeos regulares. Si usted desea expresar su solidaridad hacia su amigo, haga de su salud su prioridad y programe un chequeo siguiendo la guía de la Sociedad Estadounidense del Cáncer.
Céntrese en otras cosas además del cáncer.
Un diagnóstico de cáncer puede transformar su mundo por completo. Dicho esto, siguen existiendo muchas más cosas en su vida que solo su enfermedad. No todas las conversaciones tienen que ser sobre su diagnóstico o plan de tratamiento. Recuerde que puede seguir haciendo cosas de las que disfrutaba anteriormente.
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